Tenía pensado tomarme unos días libres de blog, demasiado trabajo para nada. Pero el incidente de hoy con nuestro amigo Sagan como protagonista me ha hecho cambiar de opinión.
En estos dos días sin escribir pocas noticias destacables… Aunque una en cierto modo reconfortante. Nuestro querido amigo Prudhomme I de Francia, Guillén II de España, ha sido enviado para casa positivo por COVID-19. Ni mucho menos me alegro de su positivo, pero sí de que lo larguen de su engendro de Tour. Justicia poética.
Pero volvamos a la carrera. Ayer victoria para Bennet al sprint en una jornada que pasó por las piernas de los corredores sin más que algún momentillo de tensión por el miedo a un puente en subida y a que algún Contador de turno provocara una caída merecedora de hacer perder el Tour a cualquiera. Por suerte no fue así y el irlandés se impuso después de un lanzamiento perfecto del equipo Sunweb para un Ces Bol que ni asomó por los primeros lugares del pelotón.
Más de lo mismo hoy, pero sin puente y sin Bol. Retirada por caída de Jon Izaguirre cuando De Andrés y Perico veían a López por todas partes. Esta vez, y sin que sirva de precedente, no se lo vamos a tener en cuenta. Lo normal hubiera sido ver al colombiano tirado y haciéndose mucho daño, y ya saben… Cuando un corredor de cae tanto no es por casualidad.
Así las cosas llegamos al sprint. Un sprint precioso y con un final ajustadísimo, de esos que sólo los aficionados de verdad disfrutamos viendo una y otra vez, fijándonos en los detalles, en los movimientos, en los bandazos y hasta en los gregarios que se abren una vez realizado su trabajo.
Van Aert arranca primero, Perico y CdA lo daban ya como vencedor, Bennet a su izquierda, Ewan un poco más a la izquierda y, cuando parecía que ya no había hueco para nadie más, aparece Sagan por la derecha, entre las vallas.
La maniobra del eslovaco fue peligrosa, sobre todo para él. Cualquier sprinter que se mete por las vallas sabe a lo que se arriesga, «si no le abren la puerta» puede irse al suelo. Pero es que además de las vallas siempre nos podemos encontrar con algún gilipollas que saque las manos, la cabeza o el palo selfie.
No sé si Sagan metió el hombro para esquivar al «no-aficionado», o si lo hizo con la intención de abrirse hueco, pero soy de los que piensa que en el ciclismo «hay que dejar jugar» salvo situación de extrema gravedad. También soy de los que piensa que si metemos vallas reclinadas hacia afuera por seguridad de los ciclistas pero aprovechamos para meter un espacio vertical con la publi de Leclerc estamos haciendo el gilipollas y creando más peligro del que en un principio podríamos evitar.
Sea como fuere, los integrantes de ese término utilizado por un conocido «Dinosaurio» amigo mío y que da título a este post, «Los de la New Way of Life» han vuelto a imponer su criterio y han descalificado a Sagan de la etapa con lo que eso significa de cara a su lucha en la clasificación por puntos, arruinando además un sprint que había sido precioso, sobre todo en su resolución final. Una pena para el eslovaco, sus 3 competidores de hoy ya tienen su etapa en esta edición del Tour, él no creo que la vuelva a tener tan cerca.
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Cuando todavía no había finalizado de escribir este post ya me habían empezado a caer por todas partes del «gerifalte» mayor de un grupo de what’s app que comparto con unos excompañeros de equipo, y eso que todavía no lo habían leído!!