«Como llegue Lampaert lo capo»

Casi 100 kms tardó en formarse la primera fuga de entidad en la París Roubaix 2019, lo que da muestra del alto ritmo que imprimió el pelotón durante las primeras horas de carrera. Continuos saltos de diferentes corredores sin que ninguno llegara a cuajar, a nadie le valía o nadie se conformaba con no meter a algún integrante más.

Estoy seguro que con una salída más cómoda, con unas 2 horas al tran tran, Sagan se habría llevado la victoria. Pero nada tiene que ver una carrera como Roubaix a tope desde el principio con la misma carrera «cómoda» en su inicio.

Sea como fuere Gilbert fue el justo vencedor, supo estar cuando tuvo que estar, fue valiente corriendo de tú a tú contra un Sagan a priori más favorito que él y tuvo las fuerzas suficientes para dar la estocada final seguido solamente por el joven Politt al que batió fácilmente al sprint. El alemán tiene mucha planta pero le faltó mucha picardía no cerrando su interior y dejando una autopista libre que supo aprovechar el veterano Gilbert.

La primera fuga de entidad fue peligrosa, no tanto la primera en sí como el grupo intermedio perseguidor que se formó. Si se llegan a juntar esos 2 grupos (más de 25 corredores) y cogen un poco de distancia a ver quien les echa mano. Y eso lo sabían también Jumbo y Bahréin que pusieron a sus hombres a toda máquina para dar caza cuanto antes.

«4 Monumentos dice, yo en Pinto tengo 6»

Así las cosas llegamos a Arenberg y comenzó el Roubaix de verdad, en el que empiezan a pasar las cosas que se ven, la más importante de las que no se ven ya había pasado.

Entre los favoritos Kristoff fue el primero en ceder y Van Aert el primero en irse al suelo después de un cambio de bicicleta. Todo parece indicar que la peliculilla que llevan las cubiertas sin estrenar y que las hacen muy resbaladizas podría estar detrás de su caída. Impresionante su remontada, casi tanto como su lógica «petada» final. Una vez más menudas 2 primeras horas de carrera!!

Aún así el belga fue capaz de estar cuando tenía que estar y meterse en el corte definitivo que se jugaría la carrera junto a Sagan, Politt, Vanmarcke y los 2 Quick Step, Gilbert y Lampaert.

«Que no corro Roubaix?» 😲

Todos colaboraron hasta conseguir una relativamente cómoda ventaja de 1′ sobre el grupo perseguidor donde Van Avermaet intentaba lo imposible. La lógica hacía pensar que Quick movería la carrera, sería muy osado pretender llegar al velódromo de Roubaix con Sagan y batirlo al sprint. Gilbert lo tenía claro y así lo hizo, primero se fue con Sagan y Politt con su compañero Lampaert comiéndose las uñas viendo que ni Van Aert, que había dicho basta, ni Vanmarcke, que no gana un sprint ni llegando sólo, tenían fuerzas para coger.

Por un momento se vivió una situación de esas tan absurdas que parece encantar al equipo de «los lobos», Lampaert tirando por detrás mientras Gilbert lo hacía por delante. Sí, podéis usar los pinganillos!!

Lampaert y Vanmarcke entraron y no tardó Gilbert, en el último tramo dónde podía hacer daño, en volver a intentarlo con todo lo que le quedaba. No tenía una empresa fácil, soltar al vigente campeón, pero lo consiguió, dejó a Sagan completamente vacío mostrando una de las imágenes más bonitas del ciclismo. Un campeón como él derrotado en su terreno, en el llano, en el adoquín, a menos de 10 kms a meta, en una carrera de 257 kms. Quizás el año que viene decidan hacerla de 125 kms, por eso del espectáculo y tal …

Tan sólo Politt conseguía aguantar a Gilbert mientras Lampaert arrancaba para conseguir cerrar el podio. El resto ya lo conocen, un zorro viejo (pero ocn mucha clase) pasando por el interior a un joven de 25 años que dormirá más contento que ninguno pensando en el podio que acaba de conseguir pero sin pensar en la oportunidad que acaba de perder. Hay trenes que sólo pasan una vez en la vida, que se lo digan a Landa.

Adiós al adoquín, hasta el año que viene. Hola Ardenas.

****  ****   ****

Izaguirre se lleva la Itzulia en una última etapa de juveniles. Etapas de esas distancias no merecen mayor comentario, salvo para los comentaristas oficiales a los que les encantan.